jueves, 16 de enero de 2020

Las derechas o la ideología del crimen de lesa humanidad. Europa un patio de familia.





La caída de los gigantes de Ken Follett es una novela que narra una serie de historias dentro de los hechos de la segunda guerra mundial. Entre las narraciones destacan las vidas de dos familias ricas y las de dos pobres, ambas enfrentadas con encuentros y desencuentros, unas (rica y pobre) de Rusia y otras (rica y pobre) de Inglaterra. En la novela se detalla con gran realismo la mentalidad obstusa de las clases dirigentes de Europa que aún permanecían con los hábitos y actitudes del medievo, mientras las clases trabajadoras luchaban por subsistir a las hecatombes que se sucedían por culpa de los tarados al mando.

La Europa del principio del siglo XIX seguía bajo la bota intransigente de la aristocracia. Por mor de la reina inglesa Victoria los reyes de las mayores potencias estaban emparentados.

Lazos de sangre
Su observación es muy acertada. El zar Nicolás II, el káiser Guillermo II y Jorge V de Inglaterra eran primos. Asimismo, el káiser y el zar eran tataranietos del zar Pablo I. A la vez, el káiser, el rey de Inglaterra y la esposa del zar, Alejandra de Hesse-Darmstadt, eran nietos de la reina Victoria. En España, Alfonso XIII estaba casado también con una nieta de esta, y su madre estaba emparentada con el emperador de Austria.
Blog de Xavier Casals, en:
https://xaviercasals.wordpress.com/2014/08/10/fue-la-gran-guerra-una-pelea-de-familia/amp/

Tres de los principales contendientes de la gran guerra eran primos.

Los tres tenían en común que pasaron la infancia rodeados por niñeras y enfermeras británicas. La primera lengua que aprendieron fue el inglés y fueron llamados por su nombre británico por sus madres. Así, eran William, Nicholas y George. Ninguno de ellos había sido preparado para ser gobernante ni tenía talento para serlo. Nicolás y Jorge se llevaban muy bien desde la infancia, mientras que con Guillermo nadie se llevaba.
Texto de "Los tres primos emperadores", de Daniel Postico, en:
https://www.elmundo.es/suplementos/cronica/2009/728/1254002413.html

Guillermo II, Jorge V y Nicolás II. Alemania, Inglaterra y Rusia. Tres inútiles tarados al mando.
Así que el capitalismo, en su más aberrante fórmula como aristocracia reinante, inundó de sangre de los pueblos los campos y las ciudades de Europa. Las tragedias sin igual se derramaron con crueldades sin comparación hasta entonces, crueldades que solo serán superadas por la segunda guerra mundial otro holocausto de vanidades y un terrible enfrentamiento para dilucidar el poder en el viejo mundo.

Mientras los aristócratas rusos saqueaban los pertrechos de su propio ejército antes de enviarlos a combates que en realidad eran brutales masacres, precedidas por incontables sufrimientos de la tropa que además estaba sometida por un cruel código militar por el que eran tratados peor que el ganado, con castigos como los latigazos, los trabajos forzados, el hambre y la sed, o directamente la horca y el pelotón de fusilamiento. En el otro bando, las élites británicas, sin apenas formación militar o tan escasa como la de sus enemigos rusos, mandaban también a los combates a miles de hombres a los que ya llevaban años explotando en la incipiente industria inglesa y en las minas de carbón que la movían. Los ingleses no dudaron en traer de la India y de otros territorios como Australia y Nueva Zelanda a miles de tropas con las que abonar de cadáveres las campiñas del Somme y de todo el continente.

Los juegos de la guerra, que siguen siendo la principal industria del mundo, son el paradigma de la hombría y del dominio. Los países siempre carentes de recursos para solucionar problemas simples y baratos como la vivienda, la salud o la alimentación, no dudan en derrochar ingentes recursos, auténticas fortunas y tesoros incalculables, así como movilizar, crear o transformar las industrias y los recursos habidos y por haber, cuando suenan los tambores de la guerra, incluso antes de que suenen no dudan en gastar lo que haga falta con tal de que su fortaleza quede patente.

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